Diálogo posible
El Fulano interpela a la mengana:
- Mengana, no pongás esa cara! cuántos años tenés?!
Y la mengana, no sin menos congoja:
- La edad suficiente para que los fulanos crean que ante la adversidad una debiera recordar la edad que tiene como santo remedio para no angustiarse, cuando lo que necesita una Mengana, sencillamente, es un abrazo y que te quedes.